viernes, 27 de abril de 2007

A los veinticinco y siete

Pues bien, pues felicidades, fundidas en un fuerte abrazo, amalgamado con anécdotas, viajes, alcoholes, chistes, trabajo, vida.

Uno de mis grandes amigos es el contador Escárcega, colega insuperable de casa, donde mi familia le recibe con un lugar en la mesa y al que mis hermanos le otorgan la misma amistad que él sabe devolver. Amigo al que mi madre trata como si fuese un hijo, Siempre apegado a los límites, pensante en todo momento, conocedor incansable de las teorías y marañas económicas, viajero intercontinental siempre con la guía en mano, ahorrador arraigado, futbolero, lector, novel estudiante de leyes, apasionado armador de rompecabezas que luego enmarca. Irónico, sarcástico, en ocasiones, al igual que su profesión, cuadrado al punto de la necedad. Conoce México como la palma de su mano, pero siempre se pierde. No documenta equipajes en viajes cortos, por temor a que le desvalijen la maleta y pierda sus pertenencias. Amigo de pocos, amable con todos, honestidad a toda prueba, lealtad hasta el fin, prefiere el whisky o la cerveza, le aburren las cursilerías como esta, y si un día le llamas afligido por una novia que te ha dejado, él acude, acompaña, paga las primeras y las últimas y hasta las canciones del desafinado acordeón del Chico julio.



Le he introducido con mis amistades y con ellos también ha encontrado cobijo y ha sabido ganarse a pulso la sonrisa que se otorga al que siempre es bienvenido. Canta muy hondo “con la frente marchita” y le gusta conducir por el “bulevar de los sueños rotos”, bajo las melodías de Sabina.

Pescador furtivo, suerte regular en el cubilete. Analítico, ordenado, meticuloso. Posee conocimientos extensos en la producción del café, en sus aromas, molidos, tostados y en todo lo que se relacione con el grano. De cabecera tiene al “Financiero”, y saca de la cava los mejores vinos acompañados con queso y ates.

Camina ahora con su novia-colega-amiga, Fabiola, con la que encuentra arraigo profundo y coincide con ella en cosas del amor que le proporcionan una felicidad palpable.

A los treinta y dos abriles, llega el contador, el conde, el amigo, el compadre Kéndiro. Sirvan pues estas líneas para agradecerle, ahora que está más vivo que el agua, la buena amistad que me ha brindado.

Aunque Luis Spota en "La Carta", lo diga, a mí me vale madre.

“nunca me han gustado los regalos entre caballeros, son estúpidos y significan remordimiento”
Fotografía: Buci, Kéndiro
Casa Medrano. Julio 2005.

jueves, 26 de abril de 2007

Digo Arqui....

Ahora en la oficina cuando sucede algo que tiene cierta complejidad, derivada de la naturaleza de los trabajos o que se han complicado por errores humanos, siempre iniciamos las conversaciones con la frase:

Digo Arqui

El teléfono hace rin, rin…

- “JL” asociados buenos días. (era el nombre anterior de la empresa)
- ¿Bueno?, ¿bueno?. Buenos días. Digo, ¿me podría comunicar con el arqui?
- ¿De parte de quién?
- De aquí de la obra, del maestro, es que los arquis no están y pos quiero hablar con el arqui de allá, el patrón.
- ¿De cuál obra? ¿Quién habla?
- Pos aquí el maestro Domingo. Toy en Misantla
- Ah, un momento por favor.

(Arquitecto le llama el maestro Domingo de la obra en Misantla)

- Bueno
- Si, ¿bueno?, ¿bueno?. ¿Habla el arqui?
- Así es Domingo. ¿Qué hay? ¿Qué pasó? ¿Cómo van las cosas?
- Pos ahí la llevamos arqui. Digo arqui, Lo que pasa es que la cosa, pos es que, es que, pos se esta poniendo difícil.
- ¿Por qué?
- Pos es que, hay unos problemillas que resolver y pos por eso le hablo, le estoy hablando de una caseta.
- ¿Y qué problemas son?
- Pos es que tuvimos un pequeño contratiempo. Este pos sí, eso, necesito que vengan.
- ¿Y Pablo y Raymundo? (los dos Residentes de la Obra)
- Pos no sé. No han llegado, los vi anoche, pero pos orita no están.
- Bueno y ¿qué pasó?
- Pos es que, este orita, este, pos estábamos haciendo las cepas (excavaciones en la tierra a una profundidad de 1 metro en ese caso en forma lineal, para introducir tubería de pvc para conducir agua) y pos, este, pasó la máquina y pos este, ¿bueno?, ¿bueno?...
- Sí , si te escucho.
- Ah pos este, tons pasó la máquina, y pos este, hubo por “ay” (quería decir “ahí”), este, pos una avería.
- ¿avería? Pues ¿qué pasó?
- Pos este, pos este, pos se chingó un poste.
- ¿un poste?
- Sí. un pinche poste que pos pensamos que estaba enterrado más hondo y que pos se ladeó tantito.
- ¿se ladeó? ¿El poste de que es? de luz o de teléfono,
- Es de la luz, y pos está inclinado, hay que levantarlo pero pos esta cabrón.
- ¿porqué?
- Pos es que los cables pos creo que tienen luz, y pos este hubo un corto, y sepa la chingada si tienen corriente, pero nomás se ladeó.
- Pues ahora mismo salgo para allá.
La escena del ladeado, de las averías, de los probemillas, es la siguiente:


Jajajaja.

Lo bueno es que nomás estaba ladeado. Estos cabrones, saltándose todas las normas de seguridad, todos los procesos preventivos en los trabajos a realizar, se les ocurrió que nada podía pasar. El poste fue levantado correctamente, la obra concluida satisfactoriamente y nosotros quedamos endeudados por cosas como esta y otras pequeñas averías.

En fin.

lunes, 23 de abril de 2007

Disco de la semana IV



Abril casi termina, según se quiera ver, un mes más o uno menos en nuestros andares. Como es costumbre y después de un sábado en el que se cantó hasta altas horas de la madrugada, teniendo la grata compañía de mis amigos, América, Patricio y Juan Carlos, decidí que la recomendación musical de esta semana es el disco "Lágrimas Negras" de Bebo Valdés y Diego el Cigala, producido por Javier Limón.


No hacen falta tantas canciones en un disco. Nueve solamente bastan, para que el arte, el sentimiento, el piano, la voz, el bajo, el sax, y un conglomerado de talentos, hagan que uno se quede atónito ante el resultado.


Al respecto, el poeta español Angel González, escribió un prólogo que refleja nitidamente lo que se puede escuchar, y que a la letra dice:


Lágrimas negras es el título de una canción compuesta en los años 30 por el cubano Miguel Matamoros (1894-1971) y que permanece en las memorias: "Aunque tú me has dejado en el abandono / aunque tú has muerto todas mis ilusiones...". Lágrimas negras es también el título del disco que presentan el legendario pianista cubano Bebo Valdés y el cantaor Diego el Cigala.

Una joya que tiene detrás una apasionante historia. El álbum Lágrimas negras es un proyecto de Calle 54 Records, con Fernando Trueba al frente, lo que significa que es una historia de sentimientos apasionados. El de Fernando Trueba hacia la música latina es de dominio público desde que dirigió el filme Calle 54, reflejo de una pasión vital. El flechazo de Diego el Cigala con Bebo Valdés y la canción Lágrimas negras lo cuenta el cineasta en su particular "diario de sesiones" de la grabación que documenta y enriquece este disco.


"Es una extraordinaria amalgama en la que la canción antillana suena a cante, y al revés", dice el poeta ovetense. Estos apasionamientos encadenaron otros y el resultado es el disco de un pianista cubano de 84 años y un cantaor español 50 años más joven. El álbum contiene nueve canciones que son clásicos, con la participación de músicos de primerísima fila. El contrabajista Javier Colina y el percusionista Piraña dejan su sello en casi todas las canciones. Pero en Lágrimas negras, canción que da título al disco, aparece el saxo de Paquito D'Rivera y la percusión de lujo de Tata Güines, Changuito y Pancho Terry. También hay boleros como Inolvidable, Se me olvidó que te olvidé o el Corazón loco popularizado en su día por Antonio Machín y hoy recreado con Niño Josele a la guitarra flamenca.El brasileño Caetano Veloso recita Coraçao vagabundo (una de sus primeras canciones) en Eu sei que vou te amar, de Vinicius de Moraes y Antonio Carlos Jobim. Dentro del repertorio latinoamericano, se incorpora una copla como La bien pagá con coros cubanos (Milton Cardona, Puntilla y Pedrito Ramírez), y también hay homenajes a Bola de Nieve (Vete de mí) y recuerdos a Argentina (Niebla del riachuelo) con el violín del uruguayo Federico Britos. Y siempre el piano de Bebo y la voz de Diego. Dos grandes.

Bebo Valdés es una figura capital de la música latina. Nació en Quivicán (Cuba) en 1918 y su carrera comenzó como pianista en la orquesta de Julio Cueva antes de pasar a Tropicana, bajo la dirección de Armando Romeu. Ya no paró. En 1948, Bebo Valdés era director musical de este célebre cabaret. En 1952, el productor Norman Granz le encargó la grabación de la primera descarga de jazz cubano para satisfacer el interés que esta música despertaba en Nueva York. Por la orquesta de Bebo Valdés pasó un cantante llamado Beny Moré. Creó un nuevo ritmo, la batanga, reacción cubana al mambo. Fué director musical de Lucho Gatica...En 1960, Bebo Valdés abandonó Cuba y desde 1963 vive en Estocolmo (Suecia). Durante 15 años trabajó como pianista en una cadena de hoteles hasta que en 1994, y después de 34 años sin grabar, Paquito D'Rivera le propuso un nuevo disco. Bebo Rides Again fue su reaparición. En este álbum, un Bebo de 76 años tocó el piano, compuso ocho canciones y arregló 11 temas en 36 horas. Casi nada. En 2001 participó en el filme Calle 54, de Fernando Trueba, interpretando Lágrimas negras con Cachao al contrabajo. En las mismas fechas, grabó en un día el disco El arte del sabor, con Cachao (83 años ambos) y Patato Valdés.

Ahora toca con Diego el Cigala.El tío de Diego Jiménez Salazar, artísticamente Diego el Cigala, (1968, Madrid) era Rafael Farina. De niño cantaba Diego por el Rastro madrileño y ganaba concursos de flamenco. A los 20 años, Camarón le rebautizó Dieguito y después trabajó con todos: el mismo Camarón, Tomatito, Gerardo Núñez y los mejores bailaores y bailaoras. Hoy, Diego el Cigala es uno de los artistas más importantes del flamenco y su disco en directo en el Teatro Real, con la guitarra de Niño Josele a su vera, le ha situado en un lugar de privilegio. Diego es el cantaor más abierto de la actualidad. Trabaja habitualmente con el trompetista de jazz Jerry González. Su relación con Fernando Trueba ha sido fundamental: "Haberle conocido es un cambio en mi carrera", dice Diego. "Muere con la música y con el flamenco". De Bebo Valdés, otro tanto: "De Bebo lo he aprendido todo. Aprendes cada minuto que estás con él".

Bebo Valdés y Diego el Cigala han grabado un disco llamado Lágrimas negras. Habrá que escucharles. Detenida y apasionadamente, a ser posible.
En lo personal, Lágrimas Negras, me recuerda a una persona muy querida por mí, con quien caminé un tiempo de la mano queriéndola bien y mucho. Sea como fuere, la realidad es que este albúm no puede faltar en una colección de alguién que guste de la buena música...




lunes, 16 de abril de 2007

De miedo

Después de una semana cargada de reuniones, compras, deudas, trabajos nocturnos y nada de cobros, llegué a casa a primeras horas del domingo. Insisto no fue el desvelo provocado por unos chupes. ¡No¡ Había que trabajar, en fin.

La cosa está en que la mayor parte del día la pasé bajo cobertores, música tenue, inmerso en un profundo sueño que se interrumpió debido a un apetito ensordecedor. Acto seguido, me dediqué al ocio por completo mirando TV. Después de ver el inicio de la segunda temporada de “Roma”, excelente por cierto, me quede estacionado en “Historias de Ultratumba”

Si no han visto ese programa, pasa en el Discovery, y se trata de casas embrujadas y los sucesos que les ocurren a los habitantes de las mismas. Todo bajo un análisis en donde la ciencia poco o nada puede hacer a fin explicar los fenómenos paranormales ocurridos.

Pues bien, el episodio de ayer, se trataba de una familia de cinco personas, a las cuales les ocurrían cosas verdaderamente cabronas y en donde no sólo les cerraban puertas, cambiaban cosas de lugar, etc.. sino que se dio el caso de una posesión demoníaca.

Narran entonces, el exorcismo, los violentos espasmos de la poseída, y todo lo que ocurre en torno a ello, ¿recuerdan el Exorcista?, bueno algo así. A las doce la noche el programa termina y yo también pero de miedo.

Mi casa es una vieja casona de Xico, grande y con un corredor central que cuando esta oscuro, pos me da cosa, me rajo de plano y voy prendiendo foco por foco hasta llegar al baño y regreso a mi habitación repitiendo el procedimiento en sentido inverso.

Después de no poder dormir durante media hora esperando que una pinche sombra no fuera a salir bajo mi cama, como sucedía en el programa, y recriminándome en repetidas ocasiones porque vi ese mugroso programa, volví a los brazos de Morfeo.

Y luego, bueno pues les cuento.

No ubico exactamente la hora de la madrugada en que ello ocurrió, pero de pronto siento que en mi cama al lado mío, algo que se acuesta junto a mi espalda, pienso que estoy soñando y casi me cago del susto. Ya despierto y convencido de que hay alguien ahí, pienso: volteo o no, volteo o no, me tapo, me paro de la cama, que carajo hago¡¡¡¡¡ Uta madre¡¡¡¡¡¡¡

Comienzo a rezar, no cabe duda de que en momentos así, hasta la Magnífica se la sabe uno de corridito, y armado con un Padre Nuestro lentamente volteo y en la penumbra veo un bulto que igualmente me da la espalda. Una niña en camisón blanco, cabello negro, piel blanca.

NO MAMESSSSSSSS¡¡¡¡¡¡¡ los ojos se empiezan a acostumbrar a la oscuridad al momento en que grito…

Claudia¡¡¡¡ chingaooooo¡¡¡¡¡ ¡era mi hermana¡. Jeje.
Para los que no saben, mi hermana “la pantera” es una niña de 39 años con Síndrome de Down, maravillosa y con un par de ojos azul-verdes exquisitos a la que quiero con toda el alma. Ella duerme con mi madre, pero evidentemente ayer, tuvo la grandiosa idea de irse a jetear con el hermano sin prender ninguna luz ni hacer el menor ruido en la madrugada.

La tapo, concilia el sueño casi inmediatamente, y yo me quedo, todavía una hora más recobrando el alivio. Siento que apenas vuelvo a dormir cuando suena el ojete despertador.

Hora de ir al trabajo.

Disco de la semana III

Ha pasado mucho desde 1992. Año en que Joaquín y sus inseparables, lanzaran al mercado "Física y Química". Ahora en estas semanales recomendaciones musicales, quise iniciar la semana con la letrita y el alegre ritmo de "Conductores Suicidas".


Sin alguna duda, uno de los discos en mi colección, más escuchados, más queridos, más cantados. Ahora que estas líneas se escriben, precisamente me acompaña la música en la canción de "Amor se llama el juego". Gratos recuerdos se asoman al rememorar frases de las canciones de este álbum como "... peor para el sol, que se mete a las siete en la cuna del mar a roncar, mientras un servidor le lavanta la falda a la luna..." o "...en mi casa no hay nada prohibido, pero no vayas a enamorarte, con el alba tendrás que marcharte para no volver...", está también ese juego de palabras que dice "... puedo ponerme cursi y decir, que tus labios me saben igual que los labios que beso en mis sueños..." Aunque la punta de lanza a Latinoamérica del propio Sabina se logró mediante "Y nos dieron las diez", me parece que si bien es una buena canción, el hecho de que sea tocada, remendada, en otros géneros, como banda, chunchaca, tropical, despedazada por medio de remixes, mezclas etc... pues la ha llevado a ser ahora, la canción del Sabo que menos pongo.

El disco sin embargo, posee unas preciosuras. Ahi tienen por ejemplo "A la orilla de la chimenea", "amor se llama el juego" "peor para el sol" la fabulosa canción del "pirata cojo" "pastillas para no soñar" y "conductores suicidas". "Todos menos tú" me viene igual, "Y nos dieron las diez" insisto, ya no la escucho, "Yo quiero ser una chica almodóvar", pues no me dice mucho y yo no quiero ser chica ni almodóvar ni ninguna.

"La canción de las noches perdidas" es en demasía buena... "si quieres te la cambio por un rato en la cama, ... y tiene nombre de mujer como la Soledad como el Consuelo". "los cuentos que yo cuento" digamos que pasa, pero pasa muy muy bien. De hecho he pensado en cambiar el nombre de mi empresa por "Caín, demoliciones S.A." Jeje. Esta rolita tiene una super frase que dice: "... y si de verdad me amas, no habrá casorio ¿para que?, con dos en una cama sobran testigos, cura y juez..."

Pos eso. Como bien apunta mi querido Medrano Juan Carlos, "es la canción sin sus cantores casuales"

lunes, 9 de abril de 2007

Disco de la semana II


Comienza la actividad. La semana mayor ha pasado, con ella, los rezos, las vacaciones, los días de comidas con familiares y amigos al punto de la gula. Se ha ido otra semana mayor. En mi caso, ésta nuevamente estuvo acompañada por el fallecimiento, ahora, del abuelo materno, hace un año exactamente en las mismas fechas, murió la abuela materna. Así es la vida.


Pero el mundo gira que gira, entonado en una palabra mágica y maravillosa que se llama tiempo. Así que arriba y adelante, así que ahora o nunca, así que a las rutinas, a los desatinos, a las torpezas, a la felicidad, a los errores, a los aciertos, a los abrazos, a los días de sol y nublados, a la oficina, al amor, al mar, al cielo, a las cosas que poseen los días como hoy, los días comúnes...

Aquí el disco de la semana, vale la pena.





Hace 28 años que Cat Stevens grabó su último disco de música pop, Back To Earth, y no ha sido hasta el pasado día 14 que Yusuf Islam, nombre adoptado por el cantante en 1977, ha lanzado un nuevo álbum repleto de la música que le hizo famoso titulado An Other Cup.

Aunque en prácticamente todas las canciones se hacen referencias a Alá, la carga religiosa queda disimulada por la voz y el estilo de las canciones, que difieren muy poco del estilo que nos han acompañado durante tantos años y que me cautivaron hasta llegar a
darle título a este blog. El tiempo sólo ha agravado ligeramente los sonidos, pero las canciones de Yusuf siguen sonando tan dulces como cuando era Cat quien cantaba.

De los 12 cortes que contiene el disco, sólo dos no son totalmente inéditos. Por un lado, tenemos una adaptación de su I Think I See The Light, donde el autor ha introducido guitarras blues y eléctricas, convirtiendo una canción folk en la interpretación más rock de su carrera. La otra es una versión del Don’t Let Me Be Misunderstood de Nina Simone, canción que adquiere más sentido de labios de un Yusuf Islam que perfectamente podría estar cantando una pieza autobiográfica, y en la que acerca puentes entre el Cristianismo y el Islam.

Del resto del disco, destacaría Green Fields, Golden Sands, una composición original de 1968 que no había grabado hasta ahora, que por razones obvias es la que más nos recuerda a los viejos éxitos de Cat Stevens. Aunque por lo dicho hasta ahora, pueda parecer que se trata de un álbum nostálgico, el resto de las canciones (Maybe There’s A World, One Day At A Time, In The End) saben conjugar perfectamente los viejos y nuevos sonidos, que se complementan con el afán por experimentar tan propio del cantante plasmado en el recitado de When Butterflies Leave y en la continua mezcla de instrumentos occidentales y orientales con la que ya coqueteó en sus últimos discos y que ahora se hace mucho más presente.

En definitiva, un disco como los de antaño, con una voz atemporal, y sonidos de ahora. Una demostración más de que oriente y occidente podemos vivir en paz y beneficiarnos de las influencias culturales mutuas.
Alberto Alvarez-Perea

martes, 3 de abril de 2007

Disco de la semana I

Yo sin música no puedo vivir. Significa mucho y me entretiene, me lleva por distintos estados de ánimo. No concibo una reunión con amigos, si no hay de por medio, un disquito. En mi estadía por estos rumbos, estoy absolutamente convencido de que la música es remedio infalible en toda ocasión.
Me transporta a diferentes lugares, siempre hay algo que escuchar de acuerdo al estado de ánimo o ambiente en el que uno se encuentre. Por ejemplo, en una tarde nebulosa de mi querido pueblo, Xico, no hay nada mejor que un piano de David Lanz, Wayne Gratz, Michael Gettel, Spencer Brewer, Michael Jones. En la playa, con olas y aves se antoja Bob Marley, UB40, en la oficina el lounge es buen elemento, nada mejor que un bar oscuro-humeante con jazz vocal interpretado por una mujer como Katie Melua, Madeleine Peyroux, Diana Krall, Norah Jones, al volante Eric Clapton, James Taylor, Alux Nahual. Si de amores perdidos se trata conjugándose con chupes, tenemos a José Alfredo, Chavela Vargas, María Dolores Pradera, Javier Solís, innumerables tríos y mariachis. Para el bailongo también están las bandas, y para toda ocasión, mi número uno: Joaquín Sabina. Y bueno, que decir de Serrat, Silvio Rodríguez, Pedro Guerra, Alejandro Filio, Ana Belen, Pasión Vega, Mónica Molina, Pablo Milanés, Ismael Serrano, Bebo & Cigala, Aute, Martirio, Buika, La negra, y tantos, tantos, tantos, más.
Así que de a poco, iré dando noticias de discos que, según yo, pueden bien valer la pena.






El nuevo disco de Ana Belén:

“Que no me sienta ridícula cantándolas y me emocionen”, confiesa Ana Belén quien desvela su secreto a la hora de cantar. Quizás en esa lucha por encontrar sus principios y la perfección, la cantante ha estado sin grabar durante seis años. Ella misma reconoce que es mucho tiempo, pero “la necesidad vital” que supone Anatomía, así se llama el nuevo álbum que saldrá a la venta el 6 de marzo, es mucho mayor cuando Joaquín Sabina o Antonio García de Diego ponen su poesía al servicio de su voz.

El ramillete de canciones que envuelve Anatomía viene avalado por nombres indispensables en la música española. Joaquín Sabina, Víctor Manuel, Pablo Guerrero, Bebe, Javier Limón, Pancho Varona, Antonio García de Diego, Felipe Palomo, Litto Nebbia, Leo Minax, Juan Mari Montes y Gradelio Pérez firman como autores las 13 canciones de Anatomía. Como productor, y ligado por primera vez a Ana Belén, aparece Javier Limón que llega tras haber producido a Bebo & Cigala, Paco de Lucía, Enrique Morente, Luz Casal, Andrés Calamaro, Niño Josele, Eliane Elias, Buika, Jerry González, Rosa Passos...


Pobrecita de mí cuando creía que belleza, honradez y fantasía eran tres, corazón, primas hermanas. Pobrecita de mí, pobrecito de ti...


Así arranca el primer single: Pobrecita de mí. Una canción con dedicatoria a Víctor Manuel, y que de modo biográfico hace referencias a la calle del Oso del madrileño barrio de Lavapiés, donde Ana Belén nació. Una canción ágil, rítmica y con acento cubano en la que Sabina vuelve a demostrar que hay letras para rato.

Lista de Canciones

1 Me gustaría
2 Pobrecita de mi
3 Tan azul
4 En el callejón
5 Otro nuevo planeta
6 Sálvese quien pueda
7 Rumbo al sur
8 Yo sólo soy la que soy
9 Consuelo
10 A veces sueño con nubes
11 Pero no termino
12 Si te vas
13 Hey! Mister Lennon